Mi perfil...

Hola soy Moliere, un perro en la red. Mi raza es Golden Retriever, aunque no le paro a eso porque perro es perro. Soy humanista y de izquierdas, por lo que se me puede catalogar como revolucionario y anti imperialista. Tengo un gran olfato político, lo que me ha consagrado como analista y generador de escenarios predictivos. Como soy perro, entro a todos lados como perro por su casa...

Más sobre mi...

...esto si que me ha dado algunas ventajas comparativas. He creado un Blog porque la gente desconoce el punto de vista perruno, no saben que opinamos de la política, del arte y la farándula, de la ciencia y la cultura, desconocen cuales son las cosas que nos hacen reír o entristecer. Si señor, de ahora en adelante... hay un perro en la red.

La canción más bella jamás escrita: Ti voglio bene assai

Lucio Dalla & Pavarotti


Qui dove il mare luccica
e tira forte il vento
su una vecchia terrazza davanti al golfo di Sorrento
un uomo abbraccia una ragazza
dopo che aveva pianto
poi si schiarisce la voce e ricomincia il canto:

Te voglio bene assai
ma tanto tanto bene sai
e' una catena ormai
che scioglie il sangue dint' e' vene sai...

Vide le luci in mezzo al mare
pensò alle notti la in America
ma erano solo le lampare
e la bianca scia di un'elica
sentì il dolore nella musica
si alzò dal Pianoforte
ma quando vide la luna uscire da una nuvola
gli sembrò più dolce anche la morte
Guardò negli occhi la ragazza
quegli occhi verdi come il mare
poi all'improvviso uscì una lacrima
e lui credette di affogare.

Te voglio bene assai
ma tanto tanto bene sai
e' una catena ormai
e scioglie il sangue dint'e vene sai...

Potenza della lirica
dove ogni dramma e' un falso
che con un po' di trucco e con la mimica
puoi diventare un altro
Ma due occhi che ti guardano
così vicini e veri
ti fanno scordare le parole
e confondono i pensieri.

Così diventò tutto piccolo
anche le notti la in America
ti volti e vedi la tua vita
come la scia di un'elica.

Ah si, e' la vita che finisce
ma lui non ci pensò poi tanto
anzi si sentiva felice
e ricominciò il suo canto:

Te voglio bene assai
ma tanto tanto bene sai
e' una catena ormai
che scioglie il sangue dint'e vene sai...

Te voglio bene assai
ma tanto tanto bene sai
e' una catena ormai
che scioglie il sangue dint'e vene sai...

Lara Fabian


Ainhoa y Miguel Nández


Il Divo


Andrea Bocelli


Regalo final: Shae-Lynn Bourne

Muere Delicuente Internacional y Leyenda del Hampa


Criminal que poseía un abultado prontuario murió a manos de la Policía carabobeña
(CORTESIA NOTITARDE)

Oswaldo Martínez Ojeda, alias "el Mexicano", cuyas andanzas se extendieron dentro y fuera del país, falleció el miércoles 27 02 2010 cuando la policía inspeccionaba un sector de Guacara.
El legendario criminal, de endeble contextura, rasgos indígenas y amanerada expresión, después de cuatro décadas de espectaculares asaltos y crímenes, fue abatido por carambola por un modesto policía municipal de Guacara (Carabobo).

Un ciudadano denunció que se había evadido luego de haber sido secuestrado y cuando la policía exploraban la zona del presunto secuestro, se toparon con el hombre considerado por muchos policías y criminalistas como un genio del mal, un asaltante inteligente e ilustrado pero asesino y sanguinario a la vez.

Dentro de su abultado currículo criminal figuran más de mil asaltos, el asesinato de tres efectivos de la GN, dos inspectores de la policía científica, dos custodios carcelarios, el robo a 43 camiones blindados, al asalto a un avión de transporte de valores "Transvalcar", decenas de joyerías y el robo a una fortificada sede de transporte de valores.
Sus inicios en el mundo del hampa
Su primer registro policial data del 11/10/1971, cuando intentó apoderarse de un vehículo con un facsímil de pistola. El juez consideró luego que era un tímido chico que pronto se enderezaría y optó por liberarlo. Sin embargo al año siguiente fue detenido en 3 ocasiones, en 1973 lo capturaron una vez y en 1974 fue detenido nuevamente.
Un culto ladrón
En 1974, Martínez Ojeda viajó a Londres, París, Madrid y Roma. Durante su estada en Europa aprendió a hablar francés, inglés e italiano. Además realizó estudios de Geología. Sentía particular interés por las piedras preciosas.
En 1978 regresó a Venezuela para perpetrar unos cuantos asaltos que le permitieron la logística para viajar de nuevo al continente europeo y de allí se fue a Afganistán, donde se enroló 5 años con grupos independentistas antisoviéticos. Aprendió técnicas de supervivencia, guerra de guerrillas y manejo de aeronaves.
En 1983 regresó a Venezuela para poner en práctica sus conocimientos.
En 1985 acumuló una docena de asaltos a bancos en Caracas. Ya era el hampón más buscado.
Fue un experto en fugas y evasiones
El 14/1/86 fue apresado en flagrancia durante un robo y fue enviado al penal de Tocuyito; pero tres meses después logró evadirse por un túnel junto a peligrosos antisociales.
El 8 de diciembre de 1986 fue recapturado y enviado a la cárcel de Los Teques, donde volvió a evadirse junto a otros presos.

En noviembre de 1987 fue capturado cuando merodeaba una joyería y fue recluido en la carcel "La Planta". Días después su celda amaneció vacía.

El 25/11/92 reapareció en el aeropuerto de Puerto Ordaz junto a su hermano Luis Enrique, Juan José Avendaño Aular, alias "capitán Avendaño" y otros antisociales. Con fusiles y granadas asaltaron el avión de Transvalcar. Asesinaron al piloto, copiloto, a dos vigilantes y cargaron con 86 millones de bolívares en billetes y lingotes de oro. La banda huyó a Costa Rica, donde montaron una arepera como fachada, aunque en las noches salían a robar.

En 1994 funcionarios de Interpol capturaron a su hermano Luis Enrique, a su cuñado Luis Sánchez Díaz, Abel Rodríguez Rangel y al "capitán Avendaño". Martínez Ojeda logró escapar a México, pero fue detenido al resultar herido cuando intentaba vender armas a unos narcotraficantes. Luego fue deportado y de allí se le endilgó el apodo de alias "el Mexicano". Todos fueron enviados a la cárcel de El Dorado, en el estado Bolívar.

El hombre de las mil caras
Justo cuando se cumplían seis años del robo al avión de Transvalcar, el 25 de noviembre de 1998, los custodios localizaron en la pared de su calabozo un letrero que decía: "Chao, pronto tendrán noticias de mí". Se fugó junto a su hermano, su cuñado y Abel Rodríguez. Dejaron al "capitán Avendaño" porque lo consideraban un soplón.

Un Grupo de Acciones Especiales de la policía fue enviado con la misión de capturarlo. Seis días después concluyó la búsqueda al ser abatidos su hermano Luis Enrique y Abel Rodríguez. Recapturaron a Luis Sánchez, pero Martínez Ojeda desapareció. Varios meses después reapareció a la cabeza de unos ochenta asaltantes. Había conformado la denominada "Megabanda", su proyecto más ambicioso.
El 18 de junio de 1999 incursionaron en la inexpugnable sede de Blindados de Oriente, en Ciudad Bolívar, donde cargaron con 300 millones de bolívares y el 11 de mayo del año 2000 tomó por asalto el complejo La Francia, situado en el centro de Caracas. Robaron 600 millones en joyas.
El 28 de octubre penetró a las bóvedas de la sede principal de Valencia, Entidad de Ahorro y Préstamo, donde se apoderó de 1.200 millones de bolívares.
El 5 de octubre de 1999 asaltó la sede principal de Blindados de Oriente en Puerto Ordaz, donde sustrajo 3,9 millardos.

El 28 de octubre de 1999 se introdujo en el Complejo de Jose, en Barcelona, de donde se llevó 280 millones: los aguinaldos de los obreros.
El 11/9/2000 reapareció en la ciudad de Calabozo vestido de coronel. Asesinó a dos inspectores del Cicpc y de nuevo se había hecho cirugía plástica en el rostro.

La Disip le puso precio a su cabeza. Ofreció 20 millones como recompensa por su captura. Acostumbraba andar con una rubia en una moto.

El mítico criminal nació en 1953 en Puerto Cabello. Alistó a un hermano, un cuñado, tres sobrinos y dos de sus hijos en el mundo delictivo. Todos ellos, al igual que su consejero, fallecieron de la manera violenta como transcurrieron sus vidas.

Historia de una Intriga Latinoamericana: El Bombardeo sobre Caracas

Excelente relato de un protagonista de esta conspiración que por sus implicaciones y personajes, es digna de un Best Seller, no se lo pierdan.

Moliere.



Puntualmente, a la hora acordada, apareció en el lobby del Hotel en Río de Janeiro, un hombre mayor, alto y con gafas de sol que ocultaban unos ojos claros muy vivos. Era el capitán (r) Carlos Migliora, ex piloto de Aerovías Brasil, quien perteneció al Grupo Assas Brancas (Alas Blancas) de la Reserva de las Fuerzas Aéreas del Brasil. Amablemente, me invitó a sentarnos a charlar y en un perfecto inglés me narró de primera mano una asombrosa historia que tuvo lugar a finales de los años 40 que de haber tenido éxito hubiese cambiado la historia de Venezuela.

Justo antes de terminar la Segunda Guerra Mundial el comandante Migliora, regresaba de los Estados Unidos donde fue entrenado para volar el caza Republic P-47 Thunderbolt que Brasil enviaría proximamente a Italia a luchar contra los alemanes, donde ya había llegado un primer contingente militar. Pero la guerra terminó antes de lo esperado, y el joven oficial piloto Migliora al igual que cientos de reservistas fueron desmovilizados y dados de baja de la Fuerza Aérea. Siendo un avezado piloto no le fue difícil conseguir trabajo, comenzando a volar como copiloto en aviones Douglas DC-3 de Aerovías Brasil, justo en el momento en que abrían una nueva ruta a Miami; él era el indicado, pues hablaba perfectamente el inglés.

Douglas DC-3 de Aerovías Brasil, similar a los que volaban a Ciudad Trujillo, en República Dominicana (Foto Life)
Este trayecto que comenzaba en Río de Janeiro, y para entonces era un gran reto pues había que volar por rutas casi inexploradas, sobre miles kilómetros de selvas, y territorios apenas explorados. El vuelo hacía escalas en aeropuertos al norte del Brasil como Salvador de Bahía y Amapá, antes de volar un largo trecho sin ningún tipo de radio ayudas ni aeropuertos alternos hasta Paramaribo en Surinam; luego a Georgetown en la Guayana inglesa, Puerto España en la isla de Trinidad, y posteriormente Ciudad Trujillo, en la República Dominicana, donde el avión pernoctaba antes de llegar a su destino final en Miami al día siguiente.

La capital dominicana, Ciudad Trujillo, llamada así luego de que un huracán la destruyera en 1930 y los aduladores de oficio que rodeaban al dictador Rafael Leónidas Trujillo le ofrecieron rebautizarla con su nombre para mayor gloria de la Patria.

Al llegar allí, los aviones eran cuidadosamente revisados por los mecánicos de Aerovías Brasil, mientras los pasajeros eran alojados en uno de los mejores hoteles de la ciudad, el elegante Jaragua. En ese lugar departían alegremente los pasajeros y la tripulación alrededor de la piscina. Para despegar a la mañana siguiente muy temprano y volar hasta Miami, Florida.

Contó Migliora, -El piloto del avión, el comandante Mario Joppert Carneiro da Cunha, era un hábil aviador. Fino y educado, conversador, gran bromista, aunque algo fanfarrón-. Una tarde se cruzó con él en la piscina del hotel una bellísima joven dominicana. Rodeada de un enjambre de guardaespaldas que hacían casi imposible acercársele o abordarla. Sin embargo el piloto se las ingenió para conocerla y al poco tiempo estaban enamorados. En los sucesivos viajes, el comandante Joppert, buscaba mil excusas para retrasar el despegue del avión al día siguiente y poder pasar más tiempo con su novia. Los mecánicos virtualmente desarmaban el avión sin encontrar ninguna falla.
Piscina del Hotel Jaragua en Ciudad Trujillo durante los años 40. (Foto Blog La venda Transparente de Raifi Genao)
Casi todo salió a la perfección, sólo había un detalle que hacía esta relación muy peligrosa, la chica era la hija del general Arturo Espaillat, apodado Navajita por amigos y enemigos, jefe de la temible policía política del régimen trujillista. Aún así, los amantes se las arreglaron para burlar la vigilancia y llevar adelante su romance hasta que consiguieron que los padres de la joven consintieran el matrimonio. Poco tiempo despues, Joppert comenzó a ser invitado al círculo social de la joven e inmiscuirse en las actividades de su nueva familia. Para aquel entonces las continuas denuncias de graves violaciones de los derechos humanos en la isla, le dificultaban al régimen trujillista la adquisición de armas en el exterior, aunque los Estados Unidos se hacían de la vista gorda.

Para probar a Joppert, el general Espaillat ideó una operación clandestina para adquirir un lote de revólveres Taurus cañón corto calibre 38 en Brasil para la policía y el ejército dominicano, utilizando como intermediario a su yerno, al cual le quedó una jugosa tajada del negocio. Joppert, continuaba volando para Aerovías, aunque cada vez pasaba más tiempo en República Dominicana. Los viajes del yerno comenzaron a serle útiles al régimen.

Rafael Leónidas Trujillo, Dictador de la República Dominicana
Simultáneamente detrás de esta relación se tejían oscuras y terribles intrigas, con el estilo que haría famoso al dictador Rafael Leónidas Trujillo; desapariciones, asesinatos dentro y fuera del país, atentados a enemigos del régimen, secuestros de disidentes para ser traídos a la isla clandestinamente, entre muchos otros crímenes.

Sin embargo el tirano, veía en Rómulo Betancourt, presidente de Venezuela, un verdadero enemigo. Betancourt había alcanzado la presidencia luego de un golpe cívico militar en el año 1945. Uno de los primeros actos de gobierno de la flamante Junta Cívico-Militar fue condenar y romper relaciones diplomáticas con todos los regímenes no democráticos, como España, Nicaragua y especialmente República Dominicana. Precisamente allí en Ciudad Trujillo, comenzaron a reunirse los disidentes venezolanos encontrando protección bajo el régimen de Trujillo.
Rómulo Betancourt, presidente de Venezuela
El origen de esta inquina que se tenían mutuamente los mandatarios venezolano y dominicano no es conocida, aunque el escritor dominicano Roberto Guerrero esboza la teoría de que la primera esposa de Trujillo María Martínez, tuvo un affaire con Betancourt cuando estuvo exiliado en la isla, aunque tiene poco fundamento. Betancourt estaba decidido a derrocar a Trujillo y éste a sacar a Betancourt al precio que fuese, como bien quedaría de manifiesto años después. Existieron al menos media docena de intentos para eliminar a Betancourt como el ataque en La Habana con una jeringa llena de veneno, y otros más que se quedaron apenas en proyectos no menos imaginativos.

La ocasión para asestar un golpe a Betancourt se prestaba ideal, luego de la recién frustrada invasión de Cayo Confites, en Cuba, desde donde se preparó una impresionante fuerza de combate que incluía buques de desembarco, cazas, bombarderos, transportes, tanques, camiones, jeeps, bazucas y todo tipo de armas ligeras. El entrenamiento y movilización de este enorme grupo de combatientes, era un secreto a voces dentro del gobierno cubano de Ramón Grau San Martín, quienes no impedían la organización y reclutaban a los combatientes en sus propias narices en el Hotel San Luis en la Habana, que luego eran llevados a la base principal en la isla de Cayo Confites. Los combatientes eran en su mayoría dominicanos y cubanos, pero había pequeños contingentes de venezolanos, puertorriqueños y norteamericanos, que contaban con el apoyo de los gobiernos de Costa Rica, Haitٕí y Guatemala. Los espías de Trujillo lo habían puesto al tanto de la operación y poco faltó para que la invasión comenzara, siendo desbaratada por la tremenda presión que finalmente los norteamericanos ejercieron sobre el gobierno cubano para que arrestara a los invasores y detuviera la operación, ante la amenaza de Trujillo de bombardear La Habana al momento en que un invasor pusiese el pie en tierra dominicana. Entre las figuras que propiciaban y financiaban el golpe estaban el dominicano Juan Bosch, Rómulo Betancourt, Juan José Arévalo de Guatemala y el mandatario de Haití, Elli Lescot.

A Trujillo no le bastó destrozar la operación sino que vio la oportunidad de devolver el golpe, utilizando su servicio secreto. Junto a Espaillat planificó un asombroso proyecto para fomentar una rebelión militar en Venezuela que haría las delicias de los cineastas de Hollywood. Mario Joppert fue invitado a conversar con su suegro, le propusieron el mando de la operación, y él la aceptó. La mirada del capitán Migliora se desvaneció en el pasado, cuando dijo -y yo también acepté-, al igual que otros colegas que no quiso nombrar.

Para el plan habrían de aprovechar la gran cantidad de armas excedentes de guerra en venta en los Estados Unidos, que frente a una buena cantidad de dinero se saltaban todos los controles y permisos. En el papel, el plan parecía sencillo, pero en la práctica resultaba sumamente difícil y arriesgado. Para empezar serían adquiridos media docena de bombarderos North American B-25 Mitchell, similares a los que acaba de recibir Venezuela ese mismo año. Mediante una tapadera se pretendería comprar los aviones para el gobierno de Brasil, Joppert y el grupo de pilotos de Aerovías debían volar los aviones hasta el norte del Brasil, donde una vez aterrizados y reabastecidos en Belém de Pará, despegarían de noche para desaparecer en vuelo. -El tiempo era muy importante, ya que debíamos despegar apenas los mecánicos revisaran los aviones a fin de que lográramos cubrir el siguiente trecho, unos 2000 kilómetros de vuelo hasta una pista abierta en medio de la selva justo en la frontera con el estado Amazonas de Venezuela, cerca del Río Negro y el Cerro La Neblina-, es decir prácticamente al límite de nuestra autonomía.
Mapa de la trayectoria del vuelo que realizarían los B-25 mercenarios hasta la pista clandestina en la frontera venezolana con el Brasil, aproximadamente 2000 km
Al llegar allí, los bombarderos sufrirían una completa transformación, serían armados con bombas y ametralladoras, cambiadas sus insignias brasileñas por las escarapelas de la Fuerza Aérea Venezolana. -Una vez que estuviera todo listo, en una fecha predeterminada, acordada previamente con los militares rebeldes venezolanos, despegaríamos en la madrugada completamente cargados de bombas, incluso sacrificando combustible y volaríamos directo a Maracay y Caracas para llegar justo al salir el sol, y atacar por sorpresa.

Cada uno de los seis bombarderos tenía asignado un objetivo diferente, simulando un alzamiento de la Fuerza Aérea Venezolana. -El objetivo que a mí me asignaron- contó el capitán Migliora- fue bombardear la Escuela de Aviación Militar. El plan era llegar, soltar las bombas, sobrevolar los objetivos el tiempo mínimo suficiente para que los militares comprometidos en tierra tomaran los cuarteles militares y sitios estratégicos, y entonces tomar la decisión de o aterrizar en Maiquetía o huir a toda prisa hacia la República Dominicana o Trinidad. Si los militares lograban consumar el golpe de estado aprovechando la confusión, estaríamos a salvo, de otro modo dudo que ninguno de nosotros hubiese sobrevivido. Yo que aún era joven, me emocioné con esa aventura, para mí la sensación de emular a James Doolitle era única. La planificación de la operación se hizo en Río de Janeiro, en casa de Joppert, todos los involucrados llegábamos solos, con intervalos de 10 minutos para comenzar a revisar mapas, planificar las acciones, el cambio de tripulaciones en Belem, recibíamos informaciones secretas provenientes de Santo Domingo y hablábamos de lo que haríamos en el momento de la verdad cuando bombardeáramos Caracas y Maracay. Había que llegar con el sol en la espalda para evitar que las baterías antiaéreas, dos, tres, en realidad no sabíamos cuántas eran, nos derribasen. Arrojar las bombas sobre las pistas y los hangares para evitar que los aviones venezolanos North American AT-6C pudiesen en última instancia lograr despegar y derribarnos con sus dos ametralladoras”. Por lo que me contó el capitán Migliora, para aquel entonces ellos desconocían o no habían sido prudentemente informados de que la Fuerza Aérea Venezolana ya había recibido los primeros cazas Republic F-47 Thunderbolt, contra los cuales no hubiesen tenido mucha oportunidad los B-25.
Bombardero North American B-25H Mitchell mercenario, con esquema de la Fuerza Aérea venezolana, similar a los que usarían en la operación
-…En realidad lo que más nos preocupaba era que todos sabíamos que luego del ataque no lograríamos llegar en vuelo hasta Ciudad Trujillo ni a Trinidad, al haber \sacrificado más combustible por la carga de bombas. Tendríamos que aterrizar en suelo venezolano. Nuestra única esperanza era que triunfara la revolución y pudiésemos aterrizar en Maiquetía, corriendo el riesgo de ser fusilados de inmediato. La otra opción era intentar llegar a Trinidad, y aterrizar como pudiésemos en donde fuese. En fin, lo más seguro era que cayéramos al mar-.

Cuenta Migliora que la suerte quiso que la operación fracasara empezando, pero no por falta de planificación, sino del destino, que dispone a su antojo de todos nosotros. Mario Joppert, al sentirse rico y ungido de tanto poder comenzó a derrochar a manos llenas el dinero que llegaba vía República dominicana. Contrató a la gente para que construyeran la pista clandestina en la frontera venezolana pagando una suma fabulosa, y se quedó con parte de las ganancias. Pero todo se vino abajo cuando Joppert se involucró sentimentalmente con una bella aeromoza de Aerovías y parte del dinero comenzó a gastarlo en su nueva conquista. Inevitablemente su esposa se enteró y se lo contó a su padre, quien sin perder tiempo pagó a unos matones para que buscaran a Joppert en Brasil y le dieran una lección. Por supuesto, éste tuvo que huir y desaparecer, manteniendo un muy bajo perfil ante el temor que los agentes de Trujillo lo encontraran.

La operación se fue al traste, pero no las intenciones de Trujillo quien lo volvería a intentar varias veces más, incluyendo otro proyecto de bombardear Caracas el mismo día de la toma de posesión del nuevo Presidente Rómulo Gallegos desde Nicaragua. Pero esa, es otra historia.

Fuentes:
Entrevista realizada al capitán Carlos Affonso Migliora en Río de Janeiro en 2003, autor del libro "Breve Resumo Histórico da Aerovías Brasil" e outras historias. Río de Janeiro 1996.

Por: Fabián Capecchi 2 de noviembre de 2009


Videos e imágenes del terremoto de Chile 27/02/2010









Potente sismo de magnitud 7,3 sacude Japón

AFP Febrero 27 de 2010
Tokio.- Un sismo de magnitud 7,3 se registró en las primeras horas del sábado frente a la costa sur de Japón, según el centro geológico estadounidense (USGS) y el centro de alerta de tsunami del Pacífico indicó que no había un peligro inmediato de maremoto aunque lanzó un alerta.

El epicentro se registró a 22 km de profundidad a una distancia de 81 km al este/sudeste de Naha, en la isla japonesa de Okinawa, indicó el USGS.

La agencia meteorológica japonesa lanzó un alerta de tsunami para esta isla, indicó la agencia Kyodo.

El USGS indicó en un primer momento que el sismo fue de magnitud 7,3.

Terremoto en Japón: temor por un posible tsunami
27 de Febrero de 2010

El movimiento telúrico alcanzó 7,3 grados en la escala de Richter. Fue precedido por otros dos sacudones. Las autoridades niponas pusieron a la población en alerta ante la posible llegada de una ola gigante.

Un fuerte sismo registrado en las profundidades oceánicas, no demasiado lejos de las costas del Japón, disparó un alerta de tsunami en toda la región.

El movimiento telúrico alcanzó los 7,3 grados en la escala de Richter. Temen que el archipiélago sea arrasado por una gigantesca ola como la que hace unos años afectó Indonesia.



 
La mayoría de nuestras imágenes provienen del buscador de imágenes de Google.
Algunas de nuestras imágenes son cortesía de ihasahotdog.com
Algunas de nuestras caricaturas son originales del caricaturista Mauro Biani, para adaptarlas a nuestro contexto político, son realizados algunos cambios de dibujo y de texto.
Las caricaturas que se publican en su contexto original, no sufren modificación de sus créditos.